La gala de nominación del miércoles por la noche en Gran Hermano dejó más al descubierto las tensiones y alianzas que hay entre los participantes. Quienes fueron a placa por el voto de sus compañeros fueron Camila y Matías, aunque hubo dos más que también quedaron en la cuerda floja. Por un lado, Francisco Delgado, que había sufrido una fulminante por parte de Camila; y por el otro, Mariano, el cordobés, que se la jugó y entró al cuarto rojo por voluntad propia y ahí se encontró con un sobre de nominación.
En el cuarto rojo, los participantes pueden tener sorpresas de cualquier tipo, desde visitas inesperadas como la de Vicky Xipolitakis, o un baldazo de agua helada como el que cayó a Mariano con la nominación.
Mariano dio la nota
El cordobés le habló a Jorge Rial en la gala de nominación y se mostró muy enojado porque le retacean el uso del gimnasio. “Están atentando contra mis pechos, mis bíceps, mis tríceps, y no lo voy a permitir. Me quieren ver desinflado y no lo van a lograr, ni ellos (los de la producción) ni nadie”, dijo, medio en broma, medio en serio, y después subió la apuesta.
“Las ratas de laboratorio somos nosotros, están jugando con nosotros, es una locura esto. La producción se nos caga de risa, se chocan con los vidrios, nos sacan fotos”, explicó. “Es mejor que me saquen de acá porque me estoy enloqueciendo, voy a agarrar esa heladera y la voy a tirar contra esos vidrios. Yo necesito entrenar todos los días, si eso no se da, yo me voy porque no estoy cómodo. Voy a entrar a enloquecer, en serio".
Se trata de Camila, Francisco, Matías y Mariano, el cordobés, que tuvo mala suerte en el cuarto rojo y está "sacado" porque no lo dejan usar el gimnasio.